Tras la difusión de videos que muestran a dos israelíes secuestrados en Gaza, el mandatario solicitó atención médica y alimento
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, pidió ayuda al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) “para proporcionar alimentos” y “atención médica” a los rehenes israelíes retenidos en Gaza, y Hamás reclamó a cambio la apertura de “corredores humanitarios”.
Netanyahu “habló con el jefe de la delegación del CICR en nuestra región, Julian Larison” y “pidió su implicación para proporcionar alimentos y atención médica inmediata a nuestros rehenes”, indicó su oficina en un comunicado.
Poco después, el brazo armado de Hamás afirmó estar dispuesto a responder “positivamente” a cualquier petición del CICR, pero exigió como condición “la apertura de corredores humanitarios (…) para el paso de alimentos y medicamentos” a la Franja de Gaza.
«Las Brigadas (Ezzedin al) Qasam no privan deliberadamente a los prisioneros de comida, pero ellos comen lo que nuestros combatientes y todo nuestro pueblo come”, señaló el movimiento, que advierte: los rehenes “no recibirán ningún trato de favor mientras continúe el bloqueo y la política del hambre”.
La publicación por parte de Hamás y Yihad Islámica, su aliado, de videos el fin de semana que muestran a dos rehenes israelíes demacrados, identificados como Rom Braslavski y Evyatar David, reavivó en Israel la preocupación por alcanzar rápidamente un acuerdo para liberar a los cautivos.
En las imágenes, los cautivos aparecen muy débiles y delgados, en una puesta en escena destinada a establecer un paralelismo con la actual situación humanitaria en Gaza, amenazada por una “hambre generalizada” según la ONU.
Netanyahu acusó a Hamás de “matar de hambre deliberadamente a los habitantes de Gaza, impidiéndoles recibir ayuda”.
El mandatario israelí, que enfrenta una fuerte presión en Israel para que consiga que los rehenes vuelvan, aseguró que continuarán “los esfuerzos para recuperar a todos”.
Cientos de personas se manifestaron el sábado en Tel Aviv en apoyo a las familias y para exigir la liberación de los rehenes.
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas celebrará una sesión de emergencia sobre los rehenes en Gaza, anunció ayer el embajador de Israel, Danny Danon.
Seis personas más murieron de inanición o desnutrición en Gaza en las últimas 24 horas, informó su Ministerio de Sanidad.
Los nuevos decesos elevan a 175 el número de víctimas de lo que, según las agencias humanitarias internacionales, podría ser una hambruna, incluidos 93 niños, desde el comienzo de la guerra, según el ministerio.
MINISTRO ORA EN SITIO SANTO MUSULMÁN
El ministro israelí de extrema derecha, Itamar Ben Gvir, estuvo ayer en el sitio altamente sensible de la explanada de las Mezquitas en Jerusalén-Este para orar en ese sector ocupado y anexado por Israel.
Ben Gvir, ministro de Seguridad Nacional, uno de los más radicales de la coalición gubernamental y acostumbrado a las provocaciones, publicó en las redes sociales un video mostrándolo en la Explanada de las Mezquitas.
«De la misma manera que hemos probado que es posible ejercer nuestra soberanía en el monte del Templo, es también posible conquistar toda la Franja de Gaza y animar a una emigración voluntaria”, dijo el ministro en el video.
«Es la respuesta que debemos dar a los atroces videos publicados por Hamás”, dijo el ministro, refiriéndose a las imágenes, publicadas estos tres últimos días, de rehenes israelíes en manos de Hamás.
Considerado tercer lugar santo del Islam y que para los judíos es el monte del Templo, lugar más sagrado del judaísmo, la explanada es un polvorín donde el menor incidente puede incendiar la región.
Este tipo de visita como la del ministro israelí es habitualmente visto como una provocación por el mundo musulmán y una clara violación del statu quo vigente en los lugares santos decretado tras la conquista de Jerusalén Este por Israel en 1967.